Yo recuerdo ser consciente de lo feliz que era a los 10 años, hasta se lo dije un día a mi madre: "Mamá, qué feliz soy con 10 años" (Sí, yo siempre he tenido la cualidad de la consciencia de los buenos momentos y la capacidad de apretar el "REC" para grabármelo en el cerebro).
Y claro, he recordado.
Qué buena época! Sin problemas serios, con la autonomía de un adulto y la libertad de un niño. Con amigos que son superamigos! con hobbies que empiezan a dársete tan bien que se convierten en tus habilidades del futuro. Ahora, que también estábamos desconectados de los medios; quizás tener ahora 10 años te mete de lleno en la preadolescencia que con tanta serie juvenil y sus bombardeos de extensiones de pelo, rimmel, modelitos y adelgazamiento parecen dejar de lado el QUÉ somos para enfatizar solo el CÓMO nos exponemos.
En fin, ya nos enfrentaremos a ello a medida que G. vaya creciendo; por el momento, no quiero que deje pasar de largo lo que pone en la lista, a la que yo añadiría:
- Tener un/a maestr@ que me haya impresionado.
- Encontrar un hobby
- Tener un/a superamig@
- Sentirse segur@, cuidad@, escuchad@ y amad@.
www.lafiestadeolivia.com
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